Planta anual monoica y alógama de crecimiento compacto, con tallo de sección pentagonal y entrenudos cortos. Hojas grandes, con grandes peciolos huecos, lobuladas y con bordes aserrados, de tacto áspero. A veces muestran unas pequeñas manchas blanquecinas en el haz.
Flores monoicas, grandes, de color amarillo; en las masculinas el pedúnculo es largo y fino, mientras que en las femeninas es más grueso y corto. El fruto es un pepónide alargado, cilíndrico y ligeramente mzudo, sin cavidad central, de colores verde más o menos claro, amarillo o blanco.
La vegetación del calabacín es muy rápida y es imprescindible el calor para su desarrollo, por lo que se trata de un cultivo de verano, a no ser que se desarrolle en invernadero con calor.
La vegetación se detiene por debajo de 8ºC, y las plantas se hielan por debajo de 0ºC.
Requiere un suelo profundo, bien preparado, fresco y provisto de materia orgánica, pero se adapta a diversos terrenos, incluso cascajosos
Sembrar calabacines en semilleros calientes en febrero a marzo
En exterior desde abril a mayo
De 5 a 8 semillas por gramo
Profundidad siembra: 2 cm
Temperatura de germinación: Mín. 15ºC- Máx. 35ºC - Óptima 28ºC
Poder germinativo de 5 años
De 2 a 3 kg por ha
Entre filas: 100-150 cm
Entre plantas: 80-150 cm
La preparación del terreno se realiza con pases de cultivador o fresadora de manera que quede el terreno prfundamente mullido. Se forman caballones separados 1 o 1,5 m por los que irán los surcos de riego, permitiendo realizar la siembra a ambos lados de cada banco.
Generalmente es una especie de siembra directa en pleno campo, en primavera cuando no son de temer ya las heladas. Se preparan los caballones, se riega antes, y cuando la tierra está en tempero se siembran 3 o 4 semillas por golpe.
• Riegos frecuentes desde el principio del cultivo.
• Recalzar las plantas con un poco de tierra en la base, y guiar las plantas fuera del surco de riego.
• Abonado: la materia orgánica es fundamental para el cultivo de calabazas, que se incorporará antes de la preparación del terreno. En cuanto al abonado mineral las necesidades son de 20-20-50 unidades fertilizantes de nitrógeno, fósforo y potásio. Es importante ll abonado nitrogenado en cobertera distribuido en dos o tres veces..
La recolección se incia temprano en el mes de junio, y se realiza prácticamente a diario. La producción se prolonga hasta el mes de septiembre por las sucesivas floraciones.
En zonas de clima suave, con siembras de abril la recolección puede adelantarse hasta primavera más o menos avanzada.
Plagas
– Pulgón negro (Aphis fabae). se pueden combatir con insecticidads de contacto o sistémicos teniendo precaución que sean formulaciones de degradación rápida.
– Araña roja (Tetranychus urticae). Un ácaro que vive en el envés o cara inferior de las hojas y por su rápida multiplicación da lugar a un fuerte desequilibrio, de manera que si no se combate pronto la planta acaba por agotar las reservas y los frutos tienen un desarrollo anormal. Utilizar acaricidas específicos, donde se consiguen buenos resultados para su eliminación.
– Minadores de hoja (Liriomyza trifolii, Liriomyza bryoniae, Liriomyza strigata y Liriomyza huidobrensis). Las hembras adultas realizan las puestas dentro de las hojas jóvenes, donde comienza a desarrollarse una larva que ocasiona las típicas galerías.
Tratamientos con productos a base de Aceite de verano.
Enfermedades:
– Oidium (Erysiphe cichoracearum. Es la enfermedad que más suele padecer esta especie, produciéndose los ataques más frecuentes al final del verano, donde se cubren las hojas de un polvo característico. El producto clásico para combatirlo es el azufre en espolvoreo.
– Mildiu (Plasmapora cubensis). Se inicia con la aparición de manchas amarillentas sobre las hojas, llegando a la desecación total y por tanto la eliminación del cultivo. El tratamiento es preventivo. Se emplean fungicidas como Maneb, Zineb, etc.